La Arcilla destaca por su gran poder de absorción de calor y la eliminación de toxinas acumuladas bajo la piel, contribuyendo de esta forma al drenaje y disolución de abcesos, forúnculos e impurezas en general.
Tradicionalmente se ha utilizado para facilitar el bronceado de la piel en verano (combinar con un protector solar). Excelente para el cuidado de cabello y uñas. Aplicar como loción hidratante facial y/o corporal.